miércoles, 1 de enero de 2020

continuacion del libro parte II


Caigo una y otra vez es un limbo negro, es imposible no cerrar los ojos cuando miro aquel sillón y silla donde te sentabas para verme trabajar, “Tienes mucho potencial” me decías cuando al borde del llanto escupía vomito verbal, espero que con tanto recuerdo no me llegue un derrame cerebral porque lo espero en verdad. Hoy por la mañana me ha llegado la notificación de la policía llamándome para reconozca el cuerpo de mi padre que desapareció hace 10 días.

Miro el cielo una y otra vez, esperando una respuesta concreta y ¿por qué pasa esto cada vez que mi cicatriz a la que llamo “boca” se abre en forma de sonrisa? La verdad es que después de tanto merodear quiero pensar que dios no tiene que ver nada que ver con esto, al final dentro de sus escrituras, los problemas de la vida no son más que pruebas que el nos concede para ver si somos dignos del trono que construyo, bueno ¿en dónde queda el libre albedrio?

-Nah- debo dejar de sobre pensar las cosas, que estar triste me ha dejado mas habilidades que desconocía, definitivamente tengo que mirar hacia otro lado, lamentablemente los ojos pueden sacarse, pero, el recuerdo de lo visto permanece, viéndolo de una manera positiva, iré al cielo porque lo merezco, iré al cielo porque ahí es donde pertenezco, iré al cielo porque lo necesito, iré al cielo porque necesito un respiro.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario